El Bicho

Ayer fuimos a escalar a El Vellón, y cual fue nuestra sorpresa al ver merodear al sol a este curioso bichejo. Mediría como 7-8 cm, y ninguno de los presentes tenía la más remota idea de lo que era.

La naturaleza no deja de sorprendernos.

Calexico en la Joy Eslava

Gran concierto del grupo de Tucson en la Joy Eslava, posiblemente la sala de conciertos con mejor acústica de Madrid.

Pocos instrumentos dejaron de tocar los chicos de Calexico, y todos con gran maestría. Música lírica y detallista que, junto a la voz impecable de Joey Burns y las colaboraciones de Amparo Sánchez hicieron que el público disfrutara sin pausa durante cerca de dos horas.

No sé si es el que cantan en dos idiomas o el virtuosismo instrumental, pero el caso es que no dejo de asociar a Calexico con Arcade Fire (aunque sean grupos tan diferentes). A ver cuando los canadienses se dejan ver por aquí...

Patones nevado

Ayer fue día de escalada y nieve, una combinación muy curiosa. Al sol se escalaba bien (incluso con camiseta), pero cuando el sol se iba...las manos sufrían.

Lo peor fueron algunos bloques de piedra traviesos que se descolgaron de la cima del cañón, y que por poco no nos causan un disgusto. Lo mejor: paisaje precioso, aire limpio y escalada. Un gran domingo.

Más fotos

Córdoba - Real Sociedad

Hace tiempo que no iba por el Arcángel a ver al Cordobita. El pasado domingo me dejé caer por allí, y no me gustó demasiado lo que vi.

La defensa es muy blandita, y el miedo al descenso se ve por todos lados. La afición, aunque va al campo, no se puede decir que esté hermanada con el equipo. El resultado final (2-2) fue justo para lo que se vio, y nos dejó medio contentos.

Va a costar, pero confiemos en que podamos arañar la salvación como el año pasado.

Como curiosidades, me gustó como ha quedado el Fondo Norte después de la renovación (lo que no quita para que el Nuevo Arcángel siga siendo uno de los campos más feos de España), y descubrí dónde va la gente de botellón en Córdoba (con la lamentable pulcritud de siempre).

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Out of The Silent Planet

El Dr Ransom es secuestrado por un científico loco y un empresario sin escrúpulos y obligado a viajar en una nave espacial cuyo funcionamiento "sólo cuatro o cinco físicos vivos podrían entender" (viejo truco de los escritores de ciencia ficción para no tener que inventarse tecnicismos baratos) rumbo a Malacandra. Allí el Dr Ransom descubre un mundo fantástico, poblado por varias especies inteligentes.

Escrito en los años 40 por C.S. Lewis (el de las Crónicas de Narnia), Out of The Silent Planet combina la atractiva ingenuidad científica de Wells con ese sentido de la aventura propio de Verne y Burroughs. El resultado: una divertida lectura ligera--pero no carente de críticas al colonialismo del "hombre blanco" y al materialismo y falta de vida espiritual de la sociedad actual--ideal para desconectar de obras más monumentales.

2666

"De modo que podría decirse que Archimboldi no era un completo desconocido en Italia, aunque tampoco podría decirse que fuera un autor de éxito o de mediano éxito o de escaso éxito sino más bien de nulo éxito, cuyos libros envejecían en los anaqueles más mohosos de las librerías o se saldaban o eran olvidados en los almacenes de las editoriales antes de ser guillotinados."

Cinco novelas en una, tenuemente vinculadas por un escenario común y algún que otro personaje. Pero 2666 no sólo son cinco historias, sino cientos de ellas; una maraña de historias que se entrelazan, un "irse por las ramas" infinito ejecutado de forma sumamente artística.

El principal recurso estilístico de Roberto Bolaño son las frases eternas--de varias páginas de longitud--con numerosas comas y algunos dos puntos que difícilmente permiten recuperar el aliento. En su extremo, el autor es capaz de incrustar un relato corto ajeno a la historia principal en una única frase (eso sí, de cuatro o cinco páginas). Unos balbuceos interminables que seguramente surgieron en una sentada y que, mirándolos con detenimiento, muestran una precisión quirúrgica en el detalle y unos personajes que por estrafalarios resultan muy creíbles.

De entre los varios trasfondos de las historias destaco el amor por los libros:

"Leer es como pensar, como rezar, como hablar con un amigo, como exponer tus ideas, como escuchar las ideas de los otros, como escuchar música (sí, sí), como contemplar un paisaje, como salir a dar un paseo por la playa."

Libros en braile, libros colgados y hasta libros comprados al peso. Todo lleva a los libros:

"La lectura es placer y alegría de estar vivo o tristeza de estar vivo y sobre todo es conocimiento y preguntas. La escritura, en cambio, suele ser vacío."

Aunque no todas las partes de la obra tienen el mismo nivel--de hecho, "La parte de los crímenes" puede resultar una crónica de sucesos un poco pesada--la lectura de 2666 es un gustazo. El original uso del lenguaje, la ilimitada capacidad de Bolaño para crear personajes y lo inusitado de las situaciones mostradas hace que la extensión del libro--más de 1.000 páginas--se atraviese con rapidez.