domingo, 30 de marzo de 2008

The Name of the Wind

"Names are the shape of the world, and a man who can speak them is on the road to power"

En general, los libros suelen ser entes independientes y reservados, que te dejan vivir si tu los dejas tranquilos. Pero a veces, muy de cuando en cuando, te puedes encontrar con otro tipo de libro: egoísta, posesivo, extrovertido...como le dediques unos minutos querrá acompañarte la totalidad de tu tiempo, contándote sus historias.

The Name of the Wind, opera prima de Patrick Rothfuss, es uno de esos libros. Y la historia que te cuenta es la de Kvothe, artista ambulante, actor, músico, hechicero, aventurero...que se encuentra regentando una taberna en el anonimato, después de haber alcanzado un carácter mítico a lo largo y ancho de las cuatro esquinas de la civilización. Allí se decide a contar su historia, desde su infancia acompañando a sus padres como músicos ambulantes hasta llegar a la explicación de por qué se encuentra escondido; por el camino veremos, entre otras cosas, su estancia como vagabundo en la gran ciudad (a lo Bean en La Sombra de Ender) y su educación en la universidad (o más bien, escuela de magia tipo Hoggwards). El relato de Kvothe necesitará tres días, y en The Name of the Wind asistimos al primero de esos días.

El lenguaje está muy, muy cuidado, pero no es eso lo que le da la fuerza al libro. Como dice Rothfuss en su blog, a él sobre todo lo que le gusta es contar historias, y esa característica la hereda el protagonista del libro; el resultado: tenemos historias dentro de historias, —al estilo de, por ejemplo, Los Hermanos Karamazov o Hyperion— que refrescan la narrativa y hacen —aún— más intensa la lectura. Historias mitológicas, de aventuras y de criaturas malignas, como esperamos en un libro de fantasía; pero siempre con el toque personal del autor.

Otro aspecto que potencia el atractivo del libro es el que cuenta los años de formación y madurez de nuestro protagonista, esa época mágica en que se forma el carácter de una persona. En el caso de Kvothe, vive en estos años más experiencias —a cual más diferente— que la mayoría de nosotros en toda una vida. Si te has leído El Juego de Ender (supongo que también podríamos poner a Harry Potter en esta categoría) sabrás a qué me refiero.

Quizá el principal problema que le veo al libro es que tenemos un protagonista demasiado perfecto, que sabe hacer de todo y siempre es más listo que los demás. Es difícil verse reflejado en alguien con tan pocas limitaciones. También, como suele ser habitual aunque sea una edición muy cuidada, el mapa que trae el libro es muy poco detallado, siendo difícil poner una ubicación geográfica a las aventuras del protagonista; mejor no poner mapa y así ni lo intentamos.

Los derechos de la versión en español del libro los ha comprado Mondadori, así que "El Nombre del Viento" no debería tardar demasiado en estar disponible en las librerías. Respecto al segundo día de The King Killer Chronicle, habrá que esperar a su publicación en Estados Unidos en abril de 2009. Tampoco queda tanto...

martes, 25 de marzo de 2008

Más Mountain Bike en Córdoba: La Palomera y Arroyo Bejarano

Esta Semana Santa, como no podía ser de otro modo, hice un par de escapadas por la Sierra de Córdoba.

El primer día subí por la carretera de Villaviciosa, fui camino de los Villares y bajé por unos caminos de tierra que salen del cruce. Pasé detrás de Santo Domingo, y aparecí por la Palomera, llegando al Barrio del Naranjo. Ruta muy divertida y relativamente fácil.

El segundo día también subí hacia la Assuan, pero una vez arriba me desvié hacia el Arroyo Bejarano, a unos 1o Kilómetros. Zona muy chula, aunque es una pena que con esta sequía no hubiera tanta agua como suele ser habitual. Para bajar, el clásico camino que sale a los Morales.

Os dejo con algunas fotillos. Si queréis ver más, aquí.














domingo, 23 de marzo de 2008

Planeta Frito

Cuando, hace unas semanas, vi este pequeño libro en la estación de Atocha, su divertido título y mensaje de "ideas simples para mejorar tu calidad de vida y frenar el cambio climático" hicieron que me dejara llevar por la compra impulsiva.

El objetivo de Sergio Bulat con Planeta Frito es muy simple: convencer a la gente de que sus acciones individuales pueden ser decisivas en la lucha contra el cambio climático. La eterna teoría del granito de arena: todos somos causantes de los problemas del planeta, y todos somos parte de la solución, mediante nuestras decisiones cotidianas de consumo y forma de vida.

El libro está estructurado en tres partes: en la primera explica en que consiste el cambio climático, con algunos dramáticos ejemplos para explicar su gravedad (por ejemplo, que los glaciares del Monte Kilimanjaro se calcula que desaparecerán para 2015) y por qué es necesario pasar a la acción. Seguidamente trata formas prácticas de reducir nuestra huella de carbono (sin duda lo más interesante del libro), y por último (y para rellenar), el autor propone acciones colectivas de concienciación.

La mayoría de los consejos prácticos son obviedades ya conocidas por todos, como utilizar bombillas eficientes, transporte público, no volar (hay gente que todavía no es consciente de las brutales emisiones de los aviones), etc, etc. Pero también aparecen algunos consejos interesantes. Por ejemplo, es útil ahorrar agua no sólo por el agua en sí y su coste económico (que creedme, puede ser muy alto), sino también para ahorrar toda la energía que es necesaria para potabilizar el agua. Otro consejo curioso es que cuando cocinemos no salemos el agua hasta que ésta arranque a hervir, ya que así hervirá antes. No utilizar secadora, usar monitores planos, no dejar enchufados los cargadores de los móviles, minimizar el uso del aire acondicionado en casa y en el coche, etc, etc. La lista es larga, y no viene mal echarle un vistazo.

Como todo lo anterior no ocupa más de 130 páginas a letra grande, el libro carga con un anexo de cerca de 40 páginas que recoge un estudio de Greenpeace sobre la viabilidad de realizar una sustitución del 100% de energía renovable. Muy técnico, y que aporta poco al mensaje global del libro.

Desde luego Planeta Frito no es la obra definitiva sobre el cambio climático. Sólo recopila algunas ideas, interesantes sí, pero no especialmente innovadoras. Además engloba la lucha contra el calentamiento global en el movimiento ecologista más general, difuminando el mensaje. Un ejemplo: el autor se muestra contrario a la energía nuclear que es, desde cualquier punto de vista práctico, uno de los pilares fundamentales sobre los que ha de basar cualquier estrategia de sustitución energética (algún día haré un post sobre este controvertido tema). Libro útil, rápido de leer, pero para nada esencial.

jueves, 20 de marzo de 2008

"Medidas" contra la contaminación en Madrid


El Ayuntamiento de Madrid, vistos los desastrosos niveles de contaminación que sufre la ciudad, ha decidido actuar. A partir del año 2010, no podrán entrar en el centro de la ciudad los vehículos que no cumplan el estándar Euro 3 o superior de emisiones.

¿Qué supone ésto en la práctica? Pues muy poquito. Todos los coches matriculados en España desde el año 2000 cumplen el Euro 3, por lo que a la hora de la verdad solo se va a restringir el acceso a coches antiguos. Además, el propio Euro 3 no es que sea demasiado exigente: sólo regula los niveles de NO2, partículas en suspensión y poco más, sin considerar las emisiones de CO2. Es decir, los coches de lujo y los todoterreno seguirán entrando libremente en la ciudad, trayendo consigo toda su polución.

Una vez más nuestra queridísima Ana Botella, Delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento, aplica la estrategia del avestruz. ¿Cómo puede Madrid aspirar a ser una ciudad puntera, con esta política medioambiental? ¿Cómo pretende compararse ni de lejos a Barcelona, con sus carriles bici y sus límites de velocidad en el extrarradio?

Mucho me temo que si las olimpiadas de 2016 vinieran a Madrid se daría un espectáculo tan bochornoso como el que está dando en Pekín


miércoles, 19 de marzo de 2008

Arthur C. Clarke (1917-2008)

Ayer murió Arthur C. Clarke, uno de los pioneros de la ciencia ficción y, seguramente, el autor que mejor supo reflejar en su obra las posibilidades del progreso tecnológico. Y murió sin ver cumplidos ninguno de sus tres sueños: la paz en Sri Lanka, el fin de la dependencia del petróleo, y la evidencia de existencia de vida extraterrestre.

Mi primer encuentro con la obra de Clarke fue con El Centinela, el relato corto en el que se basó 2001: Una Odisea del Espacio, la película que luego lo haría mundialmente famoso. Es una historia breve e intrigante, donde se conjetura sobre como reaccionaría la humanidad ante un primer contacto con inteligencias alienigenas. Este mismo tema, más elaborado, forma también el núcleo del siguiente libro que me leí de él: Cita con Rama, sin duda mi libro favorito del autor, y una de las mejores novelas de la historia de la ciencia ficción. ¿Que pasaría si un objeto de varios kilómetros de largo se aproximara al Sistema Solar, y se descubriera que tiene un origen artificial?

Clarke destaca por un exhaustivo uso del conocimiento científico para idear el argumento de sus obras, lo que le sitúa claramente en el campo de la ciencia ficción "dura", el más difícil y más interesante subgénero de la CF. Ésto salta a la vista en otra de sus novelas, Las Fuentes del Paraíso (premio Hugo en 1979), donde por primera vez se especula sobre la construcción de un ascensor espacial como mecanismo más eficiente de poner satélites en órbita, idea que ha sido recogida por la propia NASA.

Otras obras notables son El Fin de la Infancia, la versión extendida de 2001 (para mi no supera al relato original) y Las Arenas de Marte. Por supuesto también tiene obras menores, como las secuelas de Rama (que mejor no leerse).

Descansa en paz Arthur C. Clarke. Quien sabe, a lo mejor algún día veremos tus deseos cumplidos.

martes, 18 de marzo de 2008

La Feria de los Discretos

"Todo daba una impresión de letargo profundo...Las casas blancas, azules, amarillas, de rosa pálido, de crema, cerradas herméticamente, parecían abandonadas; los zaguanes, regados, chorreaban agua; se olía vagamente a flores, y un perfume penetrante de azahar salía de los patios y de los huertos."

Quintín regresa a su Córdoba natal después de haber estado estudiando en Eton, Inglaterra. Allí encuentra una ciudad que no ha cambiado desde su conflictiva infancia. Sin trabajo ni pretensiones de trabajar...
"si alguna vez llegaba a ser rico, preferiría deber su dinero a la casualidad que no al esfuerzo constante, y que trabajar, como hacían los ingleses, para que sus mujeres se divirtieran y vivieran bien, era una tontería, por muy rubias, por muy bonitas y por mucha voz aflautada que tuviesen."
...Quintín se codea con toda la chusma de la ciudad por garitos y tabernas: el Manano, el Sardino, el Rano, el Animero, Bocanegra, el Ahorcado...intentando labrarse un futuro mediante timos y triquiñuelas.

Erudito, ingenioso, holgazán, dubitativo, bravucón, Quintín se nos dibuja como un personaje ambiguo, difícil de calar. Pese a todo, el lector se acaba encariñando, aunque sólo sea para perderse con él en los intrincados callejones cordobeses, magistralmente descritos por Pío Baroja:

"...la cancela destacaba sus labrados y flores de hierro sobre la claridad brillante de un patio espléndido, de sueño, con arcos en derredor y jardineras colgadas desde el techo de los corredores, y en medio de una taza de mármol, un surtidor de agua cristalina se elevaba en el aire."
La Feria de los Discretos es un libro raro. Al igual que su protagonista, no sabes muy bien por donde te puede salir. A veces parece que estamos ante una novela costumbrista con un deje melancólico (recordando a otras obras del autor como El Árbol de la Ciencia); otras veces, en cambio, uno tiene la impresión de estar leyendo una mezcla entre El Lazarillo de Tormes y Zalacaín el Aventurero, todo picardía, acción y conspiración.

Lo que nunca falta es un soberbio uso del lenguaje, especialmente en la descripción de los personajes con minuciosos detalles, convirtiendo a una veintena de palabras en personas tangibles:

"Era este señor un hombre obeso, una especie de cachalote, con las facciones abultadas, propias de un hidrópico; la piel reluciente y la voz de eunuco. Tenía una nariz microscópica, que naufragaba entre los dos mofletes, de una palidez amarillenta; unas patillas de boca de hacha tan negras que parecían pintadas con tinta, y un pelo duro, azulado, nacido sobre la frente, con un pico sobre las cejas. Llevaba brillantes en la pechera, sortijas en los dedos amorcillados y, para acabar de ser molesto, fumaba un puro kilométrico con su correspondiente anilla"
La brillante forma de escribir de Baroja, junto con la satisfacción de ver como una historia se desenvuelve en tu ciudad natal descrita con tanto acierto, ya son atractivos más que suficientes para que el libro me gustara. Si a ésto unimos un argumento ingenioso y divertido —aunque algo errático— y unos personajes muy humanos, no queda otra alternativa que rendirse ante la evidencia. La feria de los discretos es un libro imprescindible si te gusta la buena literatura y la forma de escribir de uno de los más ilustres representantes de la generación del 98.


domingo, 16 de marzo de 2008

¡Viva el petróleo caro!

El petróleo ha superado los 108 dolares esta semana, alcanzando, una vez más, records históricos. Y yo me alegro.

¿Cómo es posible? te preguntarás; ¿cómo alguien en su sano juicio puede querer que un ingrediente tan básico de nuestra economía se encarezca, repercutiendo desastrosamente en nuestra calidad de vida?

La respuesta es muy sencilla. La dependencia del petróleo en el mundo moderno es absoluta, y, tarde o temprano, hay que librarse de ella. No podemos seguir respirando humo, y expulsando CO2 y otros contaminantes a la atmósfera con los desastrosos resultados que todos sabemos. Yo quiero que el peso del petróleo en nuestra economía se aproxime a cero, y en este momento la dinámica del mercado va a mi favor.

Una de las asignaturas más interesantes que tuve en la carrera fue microeconomía. Nos hablaban de la oferta y la demanda, de la elasticidad y de los bienes sustitutivos y complementarios. Pues bien, la demanda del petróleo es inelástica, lo que quiere decir que aunque suba mucho el precio (como está ocurriendo en los últimos años), se sigue demandando la misma cantidad, lo cual no es muy positivo para nuestros objetivos. En cambio, a largo plazo, se están generando incentivos para que se demanden otros productos -los llamados bienes sustitutivos- que en este caso serían la energía renovable y las formas de transporte alternativas. Según la teoría económica, tras un período de ajuste se produce un cambio estructural en el tejido productivo, alcanzándose un nuevo equilibrio con unas dependencias del petróleo menores.

Por cada dolar que suba el petróleo, los efectos beneficiosos sobre el medio ambiente son evidentes: a los conductores les sale más caro conducir, por lo que conducen menos y buscan otras formas de moverse; las energías renovables son competitivas desde un punto de vista económico, reduciéndose la necesidad de recibir subsidios públicos y facilitándose su impulso político; y los productos cuya comercialización requieren más petróleo (por ejemplo, aquellos en los que el coste del transporte es muy alto) suben de precio, reduciéndose igualmente su demanda.

Vale que los precios de casi todo suban, y que la inflación se dispare. Vale que me salgan un poco más caras las cañitas del fin de semana y pedir libros a Amazon. No me importa. Es un precio que estoy dispuesto a pagar.

lunes, 10 de marzo de 2008

¿Quién quiere ser astronauta?

The Best Article Every Day publicó el pasado fin de semana una interesante historia: los astronautas de la Estación Espacial Internacional van a recibir un mp3 cargado de canciones con temas "celestiales", elegidas por una simpática niña noruega que ha ganado un concurso a tal efecto. Esta es la lista que ha elegido la criatura:

- Here Comes The Sun - Beatles
- Come Fly With Me - Frank Sinatra
- Rocket Man - Elton John
- Up Where We Belong - Joe Cocker and Jennifer Warnes
- Imagine - John Lennon
- Flashdance - What A Feeling - Irene Cara
- Walk of Life - Dire Straits
- Fly - Celine Dion
- Rockin' All Over The World - Status Quo
- I Believe I Can Fly - R Kelly


Y digo yo: ¿no es suficientemente duro el trabajo de un astronauta? ¿es que además de comer pildoras y hacer sus necesidades Dios sabe como, tienen que soportar esta música, sin ningún sitio al que huír?

Como buen amante de la exploración espacial que valora la gran labor científica que están desarrollando los astronautas, ahí va mi lista alternativa, mucho más compatible con la salud mental de nuestros hombres del espacio:

-Girl from mars - Ash
-Sky blue sky - Wilco
-Blister in the Sun - Violent Femmes
-Space Oddity - David Bowie
-Under the milky way tonight - The Church
-Just Like Heaven - The Cure
-The Sky Lit up - PJ Harvey
-Catch the Sun - Doves
-This monkey's gone to heaven - Pixies
-My Star - Ian Brown

domingo, 9 de marzo de 2008

Arroz con cerdo ibérico y trigueros


Plato trabajado, pero que merece la pena. Además, si hacemos bastante y congelamos el sofrito nos servirá para varias sentadas.
Ingredientes para 4 personas
  • 200 gramos de lomo de cerdo ibérico
  • 1 pimiento grande
  • 1 cebolla
  • 1 cabeza de ajo
  • Un manojo de puntas de espárragos trigueros
  • Tomillo, romero y pimienta blanca
  • Aceite de oliva virgen extra
  • 400 gramos de arroz




1) Cogemos nuestro cuchillo cebollero y picamos todos los ingredientes




2) Hacemos el sofrito, con aceite de oliva y fuego lento. Primero cebolla, ajo, pimiento y trigueros, y luego el lomo. Por último, el tomate.







3) Echamos el arroz al sofrito , y movemos un rato. Luego echamos agua caliente (el doble en volumen de la cantidad de arroz) y algo de tomillo, romero y pimienta blanca, subimos el fuego y tapamos. Esperamos diez minutos, y bajamos el fuego. Diez minutos más, apagamos el fuego y lo dejamos reposar un poco. Ya está listo nuestro arroz.

viernes, 7 de marzo de 2008

The Cure en el Palacio de los Deportes


The Cure, el mitiquísimo grupo de Sussex tocó ayer en el Palacio de los Deportes de la Comunidad de Madrid.

Una vez más, la noche empezó mal. Aunque llegamos con más de media hora de antelación, la cola para entrar era estratosférica, y tardamos más de una hora en entrar en el pabellón, por lo que nos perdimos cerca de 30 minutos de The Cure. La culpa es de una pésima organización que se empeñó en cachear a la gente a la entrada del recinto, y no supieron calcular el número de guardias necesario.
Al entrar, adiviné The Blood sonando y, efectivamente, la sangre me hervía: media hora de concierto perdida y ubicados en el lateral del pabellón, con una visibilidad casi nula y una acústica no mucho mejor.

Sonando Pictures of You decidimos buscar una mejor posición, y acabamos en el lateral opuesto al escenario, arriba del todo. Se vería poco, pero se oía bastante bien. Lullaby, Hot Hot Hot...las canciones ´se sucedían, pero el cabreo ahí seguía, sólo parcialmente moderado por el buen hacer de los Cure. "Relájate Santi", me decía, "procura disfrutar de la música".

Entonces llego el combo In Between Days, Just Like Heaven y Primary. Estas tres espectaculares canciones en sucesión, tan diferentes entre sí, consiguieron calmarme los ánimos y hacer que realmente empezara a darme cuenta del despliegue musical que estaba ocurriendo. Pude apreciar como mantiene intacta su voz el Robert Smith, pese a los años que va acumulando. Como Simon Gallup se peleaba con su bajo, sacándole ese sonido tan peculiar. Y como se iban sucediendo las canciones, intercalando temas más movidos con otros más largos y oscuros: Friday I'm In Love, Disintegration, Never Enough, Wrong Number, The Figurehead, One Hundred Years...

Yo ya estaba flipando "no me puedo creer que toquen canciones del Pornography y del Faith". Aún no sabía que lo mejor estaba por llegar: M, Play For Today y A Forest, seguramente las tres mejores canciones de mi disco favorito, el Seventeen Seconds. Tras la euforia forestal, que el público vivió a tope y donde una vez más el Gallup se recreó con su bajo, se retiraron (llevaríamos como dos horas y cuarto). Se habían ganado un pequeño descanso.

Entonces tiraron de sus dos primero discos, algo que si que no podía esperar: Three Imaginary Boys, Grinding Halt, Boys Don´t Cry, 10:15 Saturday Night, Fire In Cairo, Jumping Someone Else's Train, Killing and Arab. ¿Quíen me iba a decir que podría disfrutar en directo de esas canciones, que tanto marcaron el desarrollo de mi personalidad musical?

Tras otro breve descanso y la continua aclamación del público, salieron a tocar el Why Can´t I Be You?, canción movidita y alegre que puso la guinda al pastel. Un pastel de unas tres horas de duración, con una acertada selección de canciones (eché de menos a The Walk, Caterpillar Girl, The Love Cats o Close to me, a lo mejor las tocaron al principio aaaargh!) y una interpretación muy lograda. Cualquier rastro de cabreo está olvidado. Sin duda, los 40 euros mejor invertidos del 2008.


lunes, 3 de marzo de 2008

Diaspora

"The physical world was one vast, tangled obstacle course of pointless, arbitrary restrictions"

En el siglo XXX, la humanidad ha divergido en tres diferentes formas de vida: los fleshers —humanos convencionales como nosotros los entendemos—, los habitantes de las "polises" —superordenadores con software inteligente, y adonde muchos humanos se mudaron para alcanzar una aparente mortalidad, manteniendo recuerdos y conciencia propia—, y los robots Gleisner —mentes humanas que habitan en cuerpos artificiales.

Nuestro protagonista Yatima, nace en la polis de Konishi debido a una mutación aleatoria. Este "nacimiento" (que originalmente venía en el relato corto Orphanogenesis) es detallado por Egan en más de veinte descriptivas páginas, muy al estilo de Stapledon. En ellas explica como se forma su personalidad, y como acaba siendo consciente de su propia identidad.

"Understanding an idea meant entangling it so thoroughly with all the other symbols in your mind that it changed the way you thought about everything"

La colisión de forma imprevista, y contraria a las leyes de la física conocida, de la estrella de neutrones Lacerta G-1 genera un tsunami de rayos gamma que acaba con la vida "biológica" en la Tierra, y obliga a los supervivientes virtuales a plantearse su existencia.

"The ozone layer over half the planet would be destroyed, immediately. Nitrogen and oxygen in the stratosphere, ionised by the gamma rays, would combine into two hundred billion tonnes of nitric oxides, thirty thousand times the current amount. This shroud of NOx would not only lower surface temperatures by several degrees, it would keep the ultraviolet window open for a century, catalysing the destruction of ozone as fast as it reformed."

¿Qué otras amenazas existen que pueden acabar con su inmortalidad? Yatima y sus amigos deciden explorar la galaxia, enviando polises en todas las direcciones, para encontrar respuestas y asegurar que estarán preparados para garantizar su eterna existencia. Pero no sólo eso:


"...the astrophysics of survival is important, but we also need to speak to others who've face the same decisions, and discovered how to live, what to become. We need to understand what it means to inhabit the universe"

En su viaje van encontrando formas de vida, pero no como la esperaban. Un planeta tiene una única forma de vida: las alfombras de Wang (ya presentadas por el autor en el espectacular relato del mismo nombre), moléculas gigantes de 25.000 toneladas que forman una especie de computadora química que aloja vida inteligente virtual. Esto plantea interesantes preguntas existenciales a los ciudadanos de las polises:


"If nature had evolved 'organisms' as divorced from reality as the inhabitants of the most inward looking polis, where was the privileged status of the physical universe, the clear distinction between reality and illusion?"

Finalmente, codificado en la estructura atómica de los elementos de otro planeta, descubren que otra amenaza se cierne sobre el universo conocido, y que la única vía de escape es huír hacia otro universo n-dimensional. ¿Estarán dispuestos los ciudadanos de las polises a romper el último vínculo que les une con sus orígines biológicos?

Diaspora es un libro profundo, y Greg Egan un escritor que piensa a lo grande. ¿Que determina la conciencia humana? ¿qué conforma la inteligencia? ¿cual sería el sentido de la vida, una vez eliminadas todas las restricciones y necesidades corporales? ¿cómo compaginar una vida etérea como entes virtuales con un mundo natural que se mueve a una velocidad mucho más lenta?

"Should you dart from significant event to significant event, creating a life devoid of anything else? Probably not — but exactly how much subjective time should you endure between the moments you were, in all honesty, desperately waiting for?"

Evidentemente, las preguntas profundas planteadas no obtienen una respuesta satisfactoria. Pero Egan hace pensar al lector, que se ve obligado a ponerse en la piel (o en los bits) de Yatima y sus compañeros, en un extenuante ejercicio de empatía. El modelo físico teórico que se plantea como fondo está muy desarrollado (páginas y páginas, incluso puedes seguir las ecuaciones en la web del autor) muy coherente y lógico, pero difícil de seguir (puedes llegar a creer que estás leyendo a Roger Penrose) y tangencial a la historia:


"...the fractal distribution of the primordial inhomogeneities meant that the end products of the collapse process had a wide spectrum of masses"

Soy muy partidario de la ciencia ficción "dura", y he disfrutado mucho leyendo este libro (aunque reconozco que algunas explicaciones no las he acabado de entender). No es para todos los públicos, ni la mejor obra para iniciar a alguien en la ciencia ficción. Pero para los que os apasione la ciencia ficción no especialmente por las aventuras y lo divertido del argumento sino por las reflexiones de hacia donde puede dirigirse el ser humano como especie, este es vuestro libro. Ya lo dice Yatima:

"In the end, there was only mathematics"


sábado, 1 de marzo de 2008

Los Bombones en la sala Sol

Estuvieron en el Indyspensable.
Intentaron estar con Travis, pero la organización se la jugó.
Y por fin, ayer, Los Bombones tocaron en la Sala Sol, presentando su nuevo trabajo Diska.

La noche no empezó demasiado bien. No abrieron las puertas hasta cerca de las 23:30, y una vez dentro nos encontramos una sala casi vacía. El telonero fue Luka Booh, y reconozco que lo pasé francamente mal. No toca mal el chaval, y se defiende con su guitarra acústica...pero que moña que es. Hay que tener cuidado al oírlo cantar, ya que te puede dar una subida de azúcar en sangre.

Afortunadamente sólo tocó seis o siete canciones, y sin apenas descanso aparecieron los Bombones. Este quinteto sevillano no es una banda cualquiera. Las canciones están muy trabajadas, la voz del cantante es muy melódica (cualidad de la que tiende a abusar, pudiendo repetirse el problema de la glucosa), guitarra, bajo y batería hacen su función más que correctamente.

Y luego están los teclados psicodélicos. Aquí es donde el grupo alcanza una dimensión adicional de variedad y originalidad, ausente en la mayoría de formaciones del panorama indy nacional.
Empezaron con Mary Jane, y continuaron con las canciones del disco nuevo (que me compré por 5 euros; si todos pusieran ese precio se acabaría la piratería) entrelazadas con temas de los dos primeros álbunes. La sala se fue animando, apareció más y más gente (mucho acento sevillano) y, al igual que en el Indyspensable, disfrutamos de una versión del Girlfriend in a Comma de los Smiths y de Stroke of Genius, adaptación de Gini in a Bottle con música de los Strokes. Para terminar, Les Enfants, una frikada tecnológica muy original y movida.

Los Bombones no es mi grupo favorito. Son demasiado popie, mucho corito y no demasiado ruido. Aún así es un gran grupo, que están muy bien en directo y dan un toque de frescura a la música independiente que se hace en España.